La Estrella de Sirio
En sus conocimientos, no era arbitrario el escoger esa conjugación de Sirio con el sol ya que sabían lo que para los seres de la tierra significan estos dos astros; la relación de Sirio con Isis y de ésta con la creciente de las aguas del Nilo que en ese momento se desbordaban por sus riberas, fecundando los campos con su limo. Este era el fundamento para unas abundantes cosechas en el otoño. Más adelante veremos por qué todo esto es tan significativo.
Para ubicarnos mejor, digamos que la estrella Sirio se encuentra a una distancia de 8,6 años - luz, un equivalente a un poco más de 81 billones de kilómetros de la tierra y es la 5ª estrella más cercana al sol en todo el firmamento.
La magnitud aparente de su luminosidad es la mayor después del sol, de la luna y de algunos planetas como Venus; por esto se dice que es la estrella más brillante desde la perspectiva de la tierra. Su luminosidad real (no la aparente) es de 23 veces la de nuestro sol y su color es blanco azulino.
La bóveda celeste está dividida en 88 constelaciones. La estrella Sirio es la estrella más destacada de la constelación del Can Mayor o del Perro, que queda en el hemisferio sur, muy cerca de Orión, (tal vez la constelación más fácil de reconocer en el cielo) y relativamente cerca del eje central de la vía láctea.
Se dice que Sirio es una de estrella doble, es decir compuesta por dos estrellas que giran la una alrededor de la otra y que la segunda (descubierta apenas en 1844) es una enana blanca, de muy pequeño tamaño, pero de una masa (muy comprimida) semejante a la del sol.
En realidad Sirio es una estrella triple (compuesta por 3 estrellas) de las cuáles la tercera aún falta por descubrir en la astronomía actual.
La estrella de Sirio es el centro de un sistema solar de 52 planetas, que giran alrededor de ella. En ellos habitan seres de diferentes niveles de evolución, algunos de un nivel semejante al nuestro (nivel llamado de Biones) hasta otros de niveles muy avanzados para nosotros (llamados Triones, Cuatriones y Kats).
El sistema Sirio, o sea la estrella triple de este nombre y sus planetas pertenecen a un sistema estelar ( o sea de estrellas que giran alrededor de una estrella central) de 1.405 estrellas, llamado Pléyades. El sistema solar nuestro también pertenece a Pléyades, más aún somos la penúltima orbita de adentro hacia fuera, siendo Sirio la séptima de afuera hacia el centro. Por esto podemos decir que los mundos Sirios son unos vecinos bastante cercanos de nuestro mundo.
En el centro de Pléyades se encuentra la estrella Alción, donde reside una gran fuerza del universo llamado Yesel. Pero esto es parte de otra narración que haremos en un artículo posterior, cuando expliquemos en más detalle qué es Pléyades y su relación son la galaxia.
Es más pertinente por ahora que hablemos de los habitantes de Sirio y de la relación que ellos han tenido y tienen con nosotros, habitantes de la tierra.
Nos concentraremos en los niveles superiores de conciencia, es decir aquello que pertenecen a las jerarquías de Triones, Cuatriones y Kats. Es mucho lo que hay que decir de ellos y lo haremos en entregas posteriores más especializadas sobre cada uno; por ahora nos contentaremos con esbozar su presencia y sus nombres y la influencia que han tenido en nuestro mundo.
Mucho se ha hablado en crónicas aún muy antiguas de seres muy sabios que han vivido en la tierra dando enseñanzas, sublimes a los hombres de las distintas épocas y lugares. Han enseñado, guiado y ayudado, dejando una huella profunda en la historia de muchas civilizaciones. Les han dado varios nombres: Unos los llamaron dioses, otros maestros y algunos, avatares.
Pues bien, muchos de ellos han sido amigos visitantes de los mundos Sirios que por muchos miles de años han sido tutores amorosos de nuestro planeta. Son misioneros que no hemos reconocido en su procedencia y que en muchas ocasiones hemos mitificado y tergiversando su mensaje siempre único, aunque variado en su forma exterior:
Demos mención de algunos de ellos: Hermes Trismegisto, Adán, Eva, Isis, Osiris y Horus, Keops, Rama, Krisna, Zoroastro, Elías, Melquisedec, Gabriel y Miguel arcángel, Jesús, María, Buda, Mahoma y muchos más.
Ya podemos ver la gran influencia que el sistema Sirio ha tenido sobre el destino de la tierra.
Por último hagamos una breve descripción de cómo son las jerarquías de los maestros Sirios, hasta donde conocemos hoy en día.
Hay un regidor supremo del sistema llamado el Padre Bisirio: es el gran Padre Celestial. En su labor le ayudan unos seres muy avanzados llamados los Ancianos Menores. Las huestes protectoras de Sirio y aún de muchos sistemas Pléyades están compuestas por las jerarquías angélicas. Los mayores son lo arcángeles que son 25 los que asisten a la tierra y cuyos personajes más destacados son Gabriel, Miguel, Uriel y Rafael. Les siguen los ángeles comandantes (por ejemplo: Jehová) y luego van los ángeles mandantes, seguidos de los serafines y los querubines.
Al lado del padre Bisirio está ese principio majestuoso que llamamos "El hijo del padre" que es Jesús.
Los acompañan maestros de la talla de Maitreya, el Moria (que vive en su planeta llamado IA), Germán (conocido como Saint - Germain), Kuthumi, Sanat del planeta Kumara (regidor de Venus y protector de la Tierra), Venus (su aspecto femenino), Felipe (gran amigo de Jesús) y muchos otros conocidos y mencionados en la literatura espiritualista de nuestra época.
Con estos conocimientos adquiere mayor sentido y concreción el panorama de la historia y la unidad de procedencia de tantos ayudadores que ha tenido la humanidad.
A través de Raúl Yepes, persona dotada de especiales capacidades de percepción extrasensorial, un grupo de personas interesadas en el crecimiento personal, recibimos mensajes de varios amigos de los mundos Sirios, que como lo han hecho en el pasado, nos guían hacia un progreso integral de nuestras vidas, tanto en la selección y pulcritud de nuestros afectos, como en el fortalecimiento de nuestra salud y la comodidad en nuestra vida material. Nos animan y nos dan técnicas para que abramos nuestra conciencia y por fin encontremos a Dios en la esencia de nuestro ser interior.
En la práctica, se realizan periódicamente encuentros con ellos, donde asistimos las personas que nos encontramos en la ciudad de Medellín y las personas de fuera lo hacen a través del Internet. La trascripción de dichos encuentros también está disponible para todos. Los que desean escuchar orientación personalizada y confidencial, separan citas privadas.
Por todo lo anterior en "La Casa de Sirio", queremos ser la morada que albergue a todas aquellas personas que deseen ser los representantes del legado Sirio en la Tierra, preparándose para participar con estos grandes seres, en la gran misión de hacer grande nuestro mundo, hasta el punto que invierta sus actuales tendencias y se encamine amorosamente hacia la nueva era que le espera.
Raúl Yepes.
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